Polvorones

Nunca imaginé que hacer polvorones fuera tan sencillo.
Siempre tenía la impresión de que era una receta muy elaborada, que los ingredientes eran complicados de encontrar... No se, estas cosas que uno se imagina.
Pero nada más lejos de la realidad.
Los ingredientes son muy pocos. Para 15 polvorones aproximadamente:

• 300 gr. de harina de respostería
• 100 gr. de almendra molida (se encuentra en el super, de Vahiné, con el coco, las bolitas de adornar, los fideos de chocolate...)
• 150 gr. de manteca de cerdo (en el súper, en la zona de embutido, en las neveras)
• 150 gr. de azúcar glass.
• Opcionalmente: Un poco de cacao en polvo, un poco de canela, un poco de ralladura de limón.

Y la preparación es muy sencilla:

Se calienta el horno a 180º y se echa en la bandeja del horno la harina y la almendra molida. Se deja en el horno 15 minutos, dándole vueltas cada 4 minutos aproximadamente para que no se tueste demasidado por un lado.

Se vuelca a un bol y se deja templar, casi enfriar.

Se añaden el resto de ingredientes, el azúcar mejor tamizado. La manteca, echar unos 100 gr. e ir añadiendo si se ve que no se amalgama bien. En algunos casos no es necesario echarlo todo. Hay que insistir en el amasado, porque no es una masa como la de pan, es más harinosa, se deshace, y parece como que no se amalgama, pero finalmente sí lo hace y queda como una plastilina.

Esta sería la base de los polvorones, que se puede usar sin más. 

Pero se puede dividir en 2 o tres partes iguales y a cada parte echarle una cucharada de ralladura de limón o de cacao o de canela. Y así se tienen polvorones de varios sabores.

Una vez bien mezclado se estira con el rodillo sobre un papel de horno dejando la masa gordita, como de 1 o 1,5 centímetros. Y se corta con cortadores o con un vaso pequeñito. Se separa con cuidado de este papel de horno y se coloca sobre la bandeja del horno forrada de nuevo con otro papel de horno.

Se cortan los polvorones que se puedan y cuando se acaba se junta de nuevo la masa, se vuelve a estirar y se siguen cortando de nuevo más polvorones.

Una vez hechos, se meten a horno precalentado a 180º, pero se le pone para que caliente sólo por arriba. Y se dejan 15 minutos en el horno. 

Se sacan y no se tocan de la bandeja hasta que están completamente fríos, que es cuando se pasan a la bandeja de servirlos. No hace falta azúcar por encima. 

Así, dejándolos enfriar bien, quedan increíbles.

Así me quedaron a mí. Muy fáciles, muy rápidos de hacer y deliciosos.